Para ser específico, la portada de la música de jengibre de Grammy es en realidad un conjunto de Sheeran-Bey: "Perfect Duet", una repetición del "Perfecto" de Sheeran que está mucho más cerca de ser realmente perfecto una vez que Beyoncé está involucrada. La canción fue el penúltimo número, con Bey y Jay cogidos de la mano durante toda la entrega.
El setlist también incluía una mezcla de "Diva" de Bey y "Dirt Off Your Shoulder" de JAY; más versiones en vivo de "Feeling Myself" de Nicki Minaj; "Clique" de Kanye West, y "Watch the Throne tracks", "No Church in the Wild" y "Niggas in Paris". Entre las canciones, interludios de video jugados que incluyeron tomas de este año de la pareja en un viaje a Jamaica con sus hijos, clips que iban desde familiares hasta francamente sexy hasta un infierno ardiente.
Todo se desarrolló en una de las etapas más grandes en la historia de las giras de conciertos, que incluyó un club interactivo en el medio del estadio con una capacidad de 700, 17 bailarines, una "orquesta vertical" de 26 personas y un gran plataforma flotante culo que se movía sobre la multitud. En un guiño al infame incidente del Met Gala 2014 con Solange, Beyoncé y JAY-Z incluso descendieron al escenario a través de un ascensor. De hecho, los dos no se apartaron de su vida personal (muy pública), ya que su merch incluía una camisa con la etimología de "fuckery" y una sudadera con capucha que enumeraba momentos de su relación como "la confesión, "El amor", "las mentiras", "el desamor" y "la venganza". Como prueba de que habían alcanzado un nuevo punto culminante en sus vidas, el concierto concluyó con imágenes de la pareja renovando sus votos matrimoniales y siendo bautizados .